domingo, 20 de junio de 2010

PUTO EL QUE LEE ( escucha, escribe o piensa)





“NO EXISTEN fenómenos morales, solo existen interpretaciones morales de los fenómenos”
nietz

“La diferencia esencial que hay entre los mantenedores de la Iglesia y sus adversarios, entre los envilecidos y los hombres libres, consiste en que los primeros, privados de iniciativa propia, no existen sino por la masa, carecen de todo valor individual, se debilitan poco a poco y perecen, mientras qué la renovación de la vida se hace en nosotros por la acción espontánea de las fuerzas anárquicas”.
ELISEO RECLUS




El tema es trillado, el debate sobre la posibilidad de que se convierta en ley el matrimonio entre personas del mismo sexo saca a pasear la idiosincrasia de nuestra sociedad.
Otra vez en TUCSON CITY se lucen los fantasmas del conservadurismo mas retrogrado que puede existir en esta ciudad-pueblo, los sectores defensores de la “familia” y la “moral” encontraron nuevamente en la cruz esa espada que señala lo bueno y lo malo, lo normal y lo invertido.
Nadie parece recordar aquel legado del mecha cristo cuando decia: “ama a tu prójimo como a ti mismo”, aquí el prójimo no es cualquiera, el puto no merece ser amado y si lo aman que lo hagan en secreto, en la oscuridad, que no lo publiquen, que no se besen en publico, sus besos no son los besos de la paz, sus besos y su amor vienen del infierno. “ a la hoguera” invertidos asquerosos.
La marcha a favor del matrimonio entre hombre y mujer movilizo a una conmovedora cantidad de personas, que marcharon por convicción bajo una lluvia que puso a prueba su devoción, la mayoría es verdad jóvenes, aunque debo decir que me desilusione un poco cuando algunos alumnos me comentaron que en sus colegios religiosos los obligaron a marchar, también me quede con un sabor amargo cuando presencie la audiencia publica, espacio para el respetuoso debate y confrontación de ideas, mi desilusión no se debió solo los escasos defensores de la cuestionada reforma, sino al ver que clientelismo y el arreo de gente no es exclusividad del peronismo, si señores también los feligreses conocen esas técnicas de Satán, no solo eso, cada vez que algún orador se pronunciaba a favor del la reforma aprobada por diputados, los comandantes del ejercito de la familia y la moral tocaban las vuvuzelas ( no lector, no es broma ni fiebre mundialista), podía observarse como señoras de suntuosos abrigos gritaban una especie de grito tarzanesco, algo así como el quejido de un gorila, y los pequeños chimpancés los seguían gritando amen y tapándose las orejas, quizás también les enseñaron que escuchar es herejeria, o que el pensamiento invertido puede ser contagioso.

miércoles, 16 de junio de 2010





Félix Luna narra la masacre con honestidad: “Pero todo salió
mal y el saldo fue una tragedia que desde entonces
quedó fijada en la memoria colectiva con la dimensión
macabra de una injustificada masacre (...) un
panorama horrible: cuerpos destrozados, charcos de
sangre, heridos y mutilados por todos lados” (Ibid.,
pp. 236/238).
Pero falta algo: “Parecía que todo
había terminado, pero a las 17.40 sobrevino el último
ataque, casi una salva, producido por una única
máquina que, después de sobrevolar la zona céntrica,
se fue alejando rumbo a Montevideo: una especie
de ‘yapa’ insensata, que no respondía a ninguna
necesidad bélica” (Ibid., p. 238). Este avión llevaba
la inscripción bélica, la insignia que daba unidad a
las luchas de la época en su fuselaje: “Cristo
Vence”.
No aterrizó en ningún lugar de la Argentina.
Siguió hasta el Uruguay donde fue amablemente
recibido. Uruguay era un país tan jugado contra
Perón que se hizo cómplice de una de las peores
matanzas de nuestra historia. Que se aguanten
entonces a todos los insoportables, fanfarrones
turistas que les mandamos a Punta del Este, localidad
ya conquistada por lo más vulgar de la clase
media argentina, rastacuerista de alma. Recíbanlos
bien. Como a ese avión de la Marina que mataba
gente al grito guerrero de “Cristo Vence”.
( texto de Jose Pablo Feinmann)